Conciliación de verdad y para todos

La eurodiputada italiana Licia Ronzulli acudió el pasado el pasado 22 de septiembre a la sesión plenaria que tenía lugar esa semana en Estrasburgo para cumplimentar la votación en el Parlamento Europeo. La situación no tendría nada de particular si no fuera porque  en su regazo dormía Victoria, un bebé de apenas unos días que se convirtió en inesperada protagonista de la sesión.

Ronzulli quería llamar la atención sobre las dificultades que tienen las mujeres para conciliar su vida laboral y familiar aprovechando que recientemente se había presentado un documento para promover el empleo femenino, la igualdad entre los sexos y en contra de la violencia de género.

No seré yo quien se muestre en desacuerdo con estas loables iniciativas. Pero quiero más. Quiero que en esta sociedad donde la conciliación aún es una quimera, avancemos y logremos una conciliación de verdad y para todos. Para mujeres, para hombres, para hijos, para abuelos, para familiares enfermos... para los que nos necesitan, para nosotros mismos. Porque si somos iguales, las cosas buenas deben de ser accesibles para todos.